Navegar hasta un poblado de más de 20.000 personas que viven en casas sobre pilotes en un lago y dejarse llevar por entre sus calles de agua viendo como la vida, nunca mejor dicho, fluye es fluir con ella

El mercado flotante de Ganvié se celebra en canoas donde las mujeres Tofi, vestidas con impolutos trajes, llenan de colores y todo tipo de productos, las aguas de esta muestra perfecta de que la vida busca, y encuentra, su camino y su sitio, aunque sea sobre el agua.

Seguimos de mercados, manera inigualable de tomarle el pulso a una cultura. Ahora hablamos de los de Dantokpa y Abomey, donde el caos y bullicio están al nivel de la variedad y exotismo de lo que se ofrece. Dantokpa es uno de los más grandes de África y podemos encontrar de todo, lo difícil ¡puede ser dar con ello! El de Abomey, directamente, es único en el mundo. Hay puestos de fetiches vudú que te van a dejar helado por la impresión que causan. 

Es impactante. Es emocionante. Dos millones de personas hicieron este camino, La Ruta de los Esclavos. Visitar el árbol donde los subastaban, las habitaciones donde los encerraban en oscuridad, para que se acostumbraran a las lóbregas bodegas de los barcos en el viaje… estos y más lugares. No deja indiferente. Y es que conocer también es una manera de luchar, para que no vuelva a suceder.

Las Tata Somba, casas de adobe de la etnia Somba, son una maravilla. Sus formas no tienen nada que ver con ninguna construcción que el viajero pueda haber visto. El mismísimo Dalí o cualquier genio onírico podría haberlas dibujado. Pero lo más fascinante, es que tienen un utilidad y funcionalidad, perfectamente pensada.

Caminar las suaves colinas de Angolín, por caminos de tierra, visitando aldeas, encontrándonos a los Fon y ver a las mujeres en su día a día, con sus preciosos abalorios, coloridos trajes y peinados, harán que pasemos un bonito día, tranquilo y relajado.

 Ir acompañados de un guía que haga de traductor y ser recibidos por una familia de la etnia Holi, estar con ellos y  que nos expliquen sus costumbres y tradiciones (entre las que destacan las escarificaciones) nos acercará de una manera perfecta, para entender que no hay un ellos y un nosotros y que compartimos más de lo que nos separa.

• Holi: Es la única etnia que tiene la escarificación como parte de su cultura. Sus creencias son de profundas raíces animistas.
• Fula, Fulani o Peul: Pastores nómadas y amantes de la sencillez de la música tradicional.
• Somba: Arquitectos únicos, sus casas son auténticas maestrías de adobe que además cumplen una función defensiva muy ingeniosa.
• Tofí: Son un pueblo tímido que aún no se ha acostumbrado a los extraños, por lo que su forma de vida y sus creencias místicas no se han alterado con el transcurso del tiempo.
• Fon: Una etnia con una hermosa mezcla cultural hablando el dialecto fon, celebrando ceremonias de origen yoruba, con sus danzas gueledé y egungún, acompañadas por sus cánticos místicos.
• Taneka: Este pueblo tiene una espiritualidad guiada por sus sacerdotes animistas (vestidos con taparrabos y piel de mono o cabra) quienes creen que los fenómenos de la naturaleza y cada ser vivo tiene su propia alma.

Día 1. Vuelo internacional. 

Vuelo internacional hacia Cotonou. Traslado al hotel.

Día 2. Ganvie – Cotonou.

Comenzamos nuestro viaje de la mejor manera posible, visitando la que llaman la Venecia Africana y su increíble mercado flotante.

En Ganvié, y en canoa a motor, nos vamos a acercar al poblado de más de 20.000 habitantes que está construído sobre el lago Nokoué. 

Vamos a dejarnos llevar por sus calles de agua y además veremos uno de los mercados más fascinantes que podamos ver, el mercado flotante de Ganvié, donde las mujeres de la etnia Tofi, con sus coloridos vestidos, compran y venden todo tipo de productos, mecidas a partes iguales por las olas del lago y el buen ambiente que se respira.

Después vamos a seguir visitando mercados (como todo buen viajero sabe, una forma perfecta de conocer una cultura). 

En este caso vamos a ir a Dantokpa, el mercado al aire libre más grande de África oriental. Este mercado es toda una delicia visual y una oportunidad única para apreciar el arte, las creencias y cultura de sus gentes.

Día 3. Porto Novo- Holi.

Visitamos la capital del país, Porto Novo, donde destacan las mansiones de bonita arquitectura “afro-brasileña”. Son edificios que copian el estilo colonial portugués y fueron construidos por descendientes de esclavos que retornaron desde Brasil.

Seguimos la ruta hacia el norte  dirección Dassa para encontrarnos con los primeros rostros escarificados de la etnia Holi. 

Esta etnia es de creencias animistas y las mujeres de una cierta edad lucen complejos tatuajes corporales. Todo ello lo entenderemos mejor cuando en Cove, un pequeño poblado de techos cónicos, una familia Holi nos reciba y nos explique su forma de vida.

Por la tarde seguiremos hasta Ketou, donde hacemos noche. 

Día 4. Ketou – Campamento Fulani – Dassa.

Hoy nos espera una pequeña excursión hasta las colinas de Angolín, una remota región donde habita la etnia Fon en poblados con casitas de bambú y a la etnia Fulani, que son de los últimos pueblos nómadas de África. 

Suaves caminatas nos adentrarán a sus poblados, conociendo de cerca su modo de vida y el culto a la belleza de cada etnia, que muestra diferentes peinados, abalorios y colores en sus telas, un lugar ideal para tomar fotografías. Continuaremos hasta Dassa  para pasar la noche.

Por la tarde seguimos hasta Dassa para pasar la noche.

Día 5. Dassa-Taneka. 

Nos dirigimos más hacia el norte, hacia la pequeña aldea de Taneka, donde las cabañas cónicas albergan a una población muy orgullosa de sus costumbres ancestrales. 

Nos recibirán en el centro espiritual del poblado, visitaremos el palacio real y las cuevas donde se refugiaban de la guerra que tuvieron contra los Bariba. 

Pasaremos un plácido día sintiéndonos parte de este pequeño y acogedor poblado.

Días 6 y 7. Taneka – Boukoumbe. 

Nos despediremos de nuestros amables anfitriones para avanzar más al norte aún, hasta la cordillera del Atakora, donde el paisaje se torna verde llegando a Boukoumbe. 

Van a ser dos días espectaculares realizando una inmersión en el África que mejor conserva su cultura animista, la de la etnia Somba.

Queremos conocer a los Somba para realizar una inmersión en el África que mejor conserva su cultura animista. Además son conocidos como los maestros del adobe, pues con este material construyen sus impresionantes casas con forma de castillo. 

Estas bonitas y peculiares casas (llamadas Tata) tienen un marcado carácter defensivo. Sus bajas y estrechas entradas son una defensa muy ingeniosa frente a los invasores: para acceder hay que hacerlo agachado y de espaldas, dejando así vulnerable al enemigo que pretenda entrar. 

El paisaje de una aldea Somba no se olvida nunca, parece sacado de un cuento. Pasaremos aquí dos días visitando tranquilamente las aldeas y conociendo sus costumbres.

Día 8. Boukoumbe – Abomey.

Antes de descender hacia el sur, visitaremos un último valle con más “Tata” Somba. 

Nos despedimos de estas formas que parecen sacadas de un sueño y que sin duda nos habrán impresionado, tanto como la profundidad y complejidad de sus creencias. 

Salimos de estos paisajes de verdes valles y montañas en una larga ruta en jeep hasta llegar por la tarde a Abomey, capital de los reyes de Benin.

Día 9. Abomey – Lokossa – Lago Aheme.

Abomey es una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y guarda la memoria del antiguo Reino de Danxome, que dominaba todo el territorio costero del Golfo de Guinea. 

Los palacios reales que visitaremos no destacan tanto por su arquitectura sino por la fuerza de la historia. Reviviremos la historia de sus reyes y conoceremos las legendarias Amazonas que formaban parte del ejército. Eran mujeres que en batalla mostraban un valor y fuerza formidables y que consagraban su vida a su Rey y a la guerra.                                                                                                                                                        

Después de la visita, continuamos hasta el mercado, donde seguiremos viviendo emociones escalofriantes. El impacto está asegurado en los puestos del mercado dedicados a los fetiches usados en el Vudú.

Terminaremos el día plácidamente en el Lago Aheme, lugar de culto de los pueblos Mina y Pedah. 

Iremos en busca del pueblo pescador de Bopa para conocer al guardián de Shangó, el dios trueno, que compartirá con nosotros su sabiduría sobre medicina tradicional. 

Noche en hotel en el  lago Aheme.

Día 10. Ouidah-Cotonou.

Hoy salimos hacia la costa, para visitar Ouidah, el lugar con mayor carga emocional del país en cuanto al comercio esclavista. 

Vamos a recorrer a pie los últimos 4 kilómetros de la impactante “Ruta de los Esclavos”, el camino que las personas recorrían en su terrible camino hacia “La Puerta del No Retorno”, el momento en que eran embarcados. Un monumento en la playa recuerda a los más de dos millones de personas que salieron como esclavos hacia América.

Pero el día de hoy nos ofrece mucho más, como el “Templo de las Pitones” dedicado a estos animales que tienen un lugar muy importante en las creencias vudús.

A la hora indicada, traslado al aeropuerto.