THARU
Etnia indígena que vive al sur de las montañas del Himalaya, en la región nepalí de Terai, por lo que ellos mismos se reconocen como las tribus del bosque, ya que han habitado en las profundidades del país durante cientos de años practicando la agricultura, recolección de frutos, caza y pesca. El origen de este pueblo es dudoso, por ello está asediado de misterios y antiguas historias que siguen presentes con el paso del tiempo y las comparten con los más curiosos visitantes. Sus aislados emplazamientos han favorecido la conservación de sus tradicionales y únicas formas de vida sin influencias de otros grupos montañosos de Nepal o la cultura de la contigua India, lo que les convierte en un lugar extraordinario en todo Nepal. Es imposible no admirar sus decoraciones de canastos con conchas y plumas, sus coloridas paredes que cuentan historias de generación en generación y sus apreciados contenedores de arroz. Una visita imprescindible, es el Parque Nacional de Chitwan, donde asombran los paseos en elefante para observar en la lejanía a los rinocerontes, búfalos asiáticos, aves locales, cocodrilos y un exuberante paisaje de jungla, pues Chitwan significa en nepalí “corazón de la jungla”. Sin embargo, la poblaciones Tharu más auténticas las podremos ver en el Parque Nacional de Bardiya, donde además es mucho más probable ver tigres. Los Tharu rezan a los dioses del bosque, que nos invitan a compartir sus valores morales ambientados en su entorno natural en estas alejadas y misteriosas aldeas montañosas. Cantar con ellos sus melodías religiosas, las mismas que cantaban antaño los primeros Tharus del bosque hace cientos de años, es una experiencia que únicamente se puede vivir justo aquí, con las tribus del bosque de Nepal.