Etnias
Lenguas
Pluricultural y Multilingüe
Senegal es un país de contrastes que guarda sorpresas y tesoros y que deja una huella imborrable, como una sonrisa perpetua, en el viajero que además de visitarlo, lo llega a conocer.
El norte es árido y muy seco, subsahariano, mientras que el sur, a partir de Gambia y el río del mismo nombre, es verde y tiene montañas perfectas para hacer rutas de trekking y visitar etnias que conservan la esencia del país.
En el sur, entre Gambia y Guinea Bissau, están Casamance y Cap Skirring, donde hay playas de kilómetros de largo y coloridas barcas de pescadores que salen todos los días y que cuando arriban a la orilla llenas de pescado dan comienzo una pequeña fiesta.
También en el sur está Kafountine, donde habitan los Diola, que son animistas usan amuletos y tienen una cultura Rastafari que lo impregna todo: el relax y disfrutar del día a día son la marca de la zona.
En lo más profundo del sur, en un lugar montañoso y remoto frontera con Guinea Bissau y Malí, está el País Bassari.
Es una zona de colinas y exuberante vegetación donde viven las etnias Djalonké, Bassari, Bedik y Peul, en lo que es una burbuja conservada por un aislamiento elegido por ellos.
En el País Bassari sientes la cercanía y amabilidad de sus gentes en medio de unos paisajes que por momentos parecen sacados de un cuento. Al escuchar sus historias y leyendas, sentimos que esa parte de África que parecía perdida, está aquí muy presente.
Senegal es el típico destino que se sale de lo típico y te deja un sabor de boca que te llena y perdura.